1993, por primera vez en la historia, un papa, Juan Pablo II pisa tierra santa en visita formal. Meses después, quien fuera el primer ministro israeli, Shimon Peres, dijo que confiaban en el papa para traer la paz a Tierra Santa. Décadas después esta es la noticia en el reloj profético.
Israel confía en poder alcanzar próximamente un acuerdo con el Vaticano sobre el estatus de la Iglesia Católica en Tierra Santa, así como cuestiones económicas y fiscales para regularizar el trabajo de sus representantes.
El director del Departamento de Asuntos Religiosos de la Cancillería israelí, Bahij Mansour, a cargo de las negociaciones con la Santa Sede, expresó a Efe en conversación telefónica desde Roma su optimismo en que próximamente se pueda firmar dicho acuerdo, aunque rehusó dar una fecha. Israel y el Vaticano negocian desde hace trece años un acuerdo sobre cuestiones económicas para regularizar el trabajo y los derechos de la Iglesia Católica en Tierra Santa, que incluye nuevas normas de exención fiscal y otros asuntos municipales para propiedades eclesiásticas y centros de culto. "La aspiración israelí y del Vaticano es lograr un acuerdo que ponga fin a todas las cuestiones abiertas", manifestó Bahij, miembro de la delegación israelí desplazada a Roma y encabezada por el segundo del Ministerio de Exteriores, Dany Ayalón. No obstante, el funcionario rehusó hacer comentario alguno sobre la preocupación expresada por los palestinos de que el acuerdo que negocian Israel y el Vaticano pueda concluir legitimando implícitamente la anexión de Jerusalén Este. "Son unas negociaciones bilaterales entre Israel y el Vaticano, dos estados soberanos, en la que los palestinos no tienen nada que ver", afirmó.
Israel confía en poder alcanzar próximamente un acuerdo con el Vaticano sobre el estatus de la Iglesia Católica en Tierra Santa, así como cuestiones económicas y fiscales para regularizar el trabajo de sus representantes.
Otra de las cuestiones sometidas a debate, según constató el funcionario israelí, es el Cenáculo, lugar donde según la tradición, Jesús celebró la Última Cena con sus doce apóstoles y cuya propiedad reclama la Iglesia Católica.
No hay comentarios:
Publicar un comentario