Mi brother y "guru" Marcelo Vial, aporto un aparentemente sencillo, pero significativo (y mucho) estado en su Facebook al referirse a la comunidad cristiana metalera no de su país, sino de hispano América. Así lo describió:
Ojo, no menciono activos, sino productivos. Hay miles de creyentes que son muy activos: organizan actividades, van, vienen, viajan, regresan; pero ser activo no significa que seamos productivos. La productividad es hacer lo mismo (o mas) con menos recursos. Finalmente fuimos "escogidos para que llevemos fruto (ser productivos) y el fruto sea permanente". Por ejemplo, si en realidad fueran 8.000 como el brother lo piensa y nos comprometemos a que, en un año, ganar cada uno de los que formamos esta hermandad a un metalero para Cristo, dentro de un año, seriamos 16.000. Si se continuara esa mecánica en dos años seriamos 32.000 y en tres 64.000 y así sucesivamente.
Interesante ¿No?
No se a quien de los que tenemos en común al brother nos hizo impacto, lo que escribió; ignoro si alguno se sintió único. En lo particular me sentí impulsado para hacer lo nuestro: Predicar a Cristo.
Algunos a esta minúscula cantidad de personas lo ven como auditorio para conciertos. Otros, "clientes en potencia" para ventas. Pero estoy seguro que a muchos de los que leímos ese post, es una fuerte reprimenda porque tenemos que ser mas productivos en la predica del evangelio.
Ojo, no menciono activos, sino productivos. Hay miles de creyentes que son muy activos: organizan actividades, van, vienen, viajan, regresan; pero ser activo no significa que seamos productivos. La productividad es hacer lo mismo (o mas) con menos recursos. Finalmente fuimos "escogidos para que llevemos fruto (ser productivos) y el fruto sea permanente". Por ejemplo, si en realidad fueran 8.000 como el brother lo piensa y nos comprometemos a que, en un año, ganar cada uno de los que formamos esta hermandad a un metalero para Cristo, dentro de un año, seriamos 16.000. Si se continuara esa mecánica en dos años seriamos 32.000 y en tres 64.000 y así sucesivamente.
Pero si lo vemos por el lado pesimista y de esos 8.000 pensáramos que algunos son simples simpatizantes, otros aun ignoran porque forman parte de la comunidad cristiana metalera, otros solo les late el mensaje del white metal y en el peor de los casos que hubiera infiltrados solo para ver las actividades de los seguidores de Cristo y hacer escarnio (como hay muchos) entonces la cantidad disminuiría considerablemente.
Pero una cosa es segura: nosotros no lo veremos como números sino como almas. O condenadas a una eternidad o salvas. De nosotros depende.
Espero muy honestamente que no sea el único que lo leyó y le dejo una reflexión...
Si alguien aun no conociera el trabajo-hobbie de Marcelo, aquí se puede conocer:
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